El uso de estatina tras radioterapia…

…se vinculó a una reducción significativa de accidente cerebrovascular

 

Stephanie Edwards
CONFLICTOS DE INTERÉS
12 de julio de 2019

Pacientes con arteriopatía coronaria documentada que tomaron estatinascdespués de radioterapia por cáncer de tórax, cabeza o cuello, mostraroncuna reducción significativa en accidente cerebrovascular y tendencia hacia una reducción en los eventos cardiovasculares y cerebrovasculares, señala nuevo estudio.
En un estudio retrospectivo de una cohorte de 5.718 cardiópatas que recibieron radioterapia entre 2000 y 2011 por cáncer de tórax o cabeza o cuello, los investigadores evaluaron el efecto del uso de estatina sobre desenlaces vasculares. De estos, 4.166 eran usuarios de estatina y 1.552 no estaban recibiendo este tipo de fármaco.
«Demostramos que el uso de estatina se asociaba a una reducción significativa de 32% en la presentación de accidente cerebrovascular, así como a una fuerte tendencia hacia la reducción del criterio de valoración compuesto, consistente en eventos cardiovasculares y cerebrovasculares», señaló el autor para correspondencia, Dr. Negarh Mousavi, del

Departmento de Medicina, del McGill University Health
Centre, en Montreal, Canadá.
Añadió que el estudio «plantea la necesidad de estudios aleatorizados controlados prospectivos para establecer de manera definitiva el beneficio de las estatinas en esta población con riesgo y definir guías para el manejo de la vasculopatía inducida por radiación».

El artículo fue publicado en la versión electrónica de Journal of the American Heart Association.
El Dr. Vincent Bufalino, del Advocate Heart Institute, en Normal, Estados Unidos, quien no intervino en la investigación, indicó que este estudio muestra una «conclusión fascinante».
Asimismo, el Dr. Bufalino comentó a Medscape: «Quienes atendemos cotidianamente a estos pacientes sabemos que las estatinas funcionan.
Funcionan además para cardiopatía, funcionan en pacientes con enfermedad cerebral, y en este caso funcionaron en pacientes que tenían cáncer y también angiopatía».
Estuvo de acuerdo en que es necesario realizar más estudios e investigación científica para comprender la relación entre arterias radiadas y estatinas.
Resultados promisorios
La radioterapia es un tratamiento eficaz para muchos tipos de cáncer; sin embargo, la exposición a esta clase de tratamiento aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular y cerebrovascular, y es la causa principal de morbilidad y mortalidad en sobrevivientes de cáncer, afirmaron los autores.
«No se dispone de estudios que exploren si las estatinas reducen complicaciones vasculares en pacientes con cáncer después de radioterapia de tórax, cabeza y cuello», destacó el Dr. Mousavi. Por consiguiente, este estudio observacional, el más grande de su clase hasta el momento, tuvo como propósito explorar si las estatinas reducen las complicaciones cardiovasculares y cerebrovasculares inducidas por la radiación en pacientes con cáncer después de radioterapia de tórax, cabeza y cuello.

Los pacientes se obtuvieron de una serie de datos de un total de 380.000 personas mayores de 45 años de la población de Quebec, que tenían angiografía coronaria, síntomas coronarios agudos o que se habían sometido a un procedimiento de revascularización coronaria entre agosto de 2000 y marzo de 2011. Solo se incluyó a pacientes mayores de 65 años, porque integraban el único subgrupo con cobertura universal de fármacos.
El criterio principal de valoración de interés fue la presentación de algún evento cerebrovascular (ataque isquémico transitorio, accidente cerebrovascular, revascularización carotídea o muerte por accidente cerebrovascular) o un evento cardiovascular (infarto de miocardio o infarto de miocardio mortal). Un criterio secundario de valoración fue la presentación de solo accidente cerebrovascular, escribieron los autores.
Hicieron ajustes con respecto a edad, género, fibrilación auricular, arteriopatía coronaria, infarto de miocardio previo, nefropatía crónica, enfermedad cerebrovascular, diabetes mellitus, dislipidemia, insuficiencia cardiaca e hipertensión.
El uso de estatina tras radioterapia se asoció a una reducción no significativa de 15% en el criterio principal de valoración, pero a una reducción significativa de 32% en accidente cerebrovascular solo.

Los autores señalaron limitaciones con la base de datos, como el antecedente de tabaquismo y la administración de estatina, así como la incapacidad para considerar todas las variables de confusión. Pese a estas limitaciones, el estudio ofrece «un esclarecimiento promisorio de los beneficios potenciales de los

tratamientos hipolipemiantes después de radioterapia», concluyeron.
Los autores declaran que los puntos de vista expresados son los del autor y no reflejan la política oficial del Fort Belvoir Community Hospital, la Defense Health Agency o el Departamento de Defensa o el Gobierno de Estados Unidos.